Yo no te esperé
pero no te encontré sentado en el umbral de la vereda prendiendo un cigarrillo con otro jugando a ser anillos de humo no te vi buscar frenético el mp3 en tu morral negrocuero y pasar la canciones sin encontar la que diluya tu espera no senti el tarareo de luces esfumadas ni el caminar ida y vuelta de la cuadra que decide no traerme no te miré encontrarme en otras miradas recostado en el piso los ojos cerrados adivinando los pasos jugando a descubrir tacones
Y entonces
en el momento justo
no te vi mirar de reojo la sombra que coincida con los pasos de tu memoria
y no osé doblar la esquina
pero no te encontré sentado en el umbral de la vereda prendiendo un cigarrillo con otro jugando a ser anillos de humo no te vi buscar frenético el mp3 en tu morral negrocuero y pasar la canciones sin encontar la que diluya tu espera no senti el tarareo de luces esfumadas ni el caminar ida y vuelta de la cuadra que decide no traerme no te miré encontrarme en otras miradas recostado en el piso los ojos cerrados adivinando los pasos jugando a descubrir tacones
Y entonces
en el momento justo
no te vi mirar de reojo la sombra que coincida con los pasos de tu memoria
y no osé doblar la esquina
3 comentarios:
Así nos diluimos en la multitud y esa cosa grande que nos rodea y que le llamamos el "resto" o "los demás" y que formalmente se llama sociedad nos traga, ya no somos.
Un saludo... hoy me pasó algo similar con lo que escribiste.
- No era yo, pero podría haberte encontrado, visto, pero no en este pasado posible. Hermoso Nanu. Un beso. Ade
Yo soy de imaginar pasados que sucedieron cuando estaba ausente... Ya ni siquiera me importa si son posibles.
Hermoso relato.
Besos.
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